Crea un gremio o intégrate a uno. Cuando participes en un gremio, podrás acceder a las batallas de titanes haciendo clic en el componente de Gremios y luego yendo a la pestaña Batalla de titanes para pelear con el titán actual, si está disponible.
Los titanes son un tipo especial de monstruo. Tienen una habilidad formidable que inflige mucho daño (desde el 50 % al 100 % de tus PV máximos) cuando el contador llegue a cero. Recuerda que son particularmente INCANSABLES; es decir, aun si los aturdes, esto no evitará que usen su habilidad.
Sin embargo, ello no significa que aturdirles no tenga utilidad alguna. Todos los titanes cuentan con un ataque normal que se hace cada vez más fuerte y que se puede bloquear si los aturdes. El incremento se indica con un número dentro del icono de potenciación (flecha hacia arriba).
Asimismo, al titán lo ayuda un sinfín de secuaces y sectarios. Infligir daño a estos monstruos acompañantes no dañará al titán ni se sumarán esos puntos al daño contribuido. No obstante, matar a los secuaces sí es útil porque pueden estar ocultando pociones cargadas detrás de sí mismos. Decide a quién atacar con prudencia.
No esperes matar a un titán tú solo. Se trata de un trabajo en equipo. Cuando aparezca un nuevo titán, tu gremio dispondrá de varias horas para derrotarlo. Cada jugador empieza con tres intentos de infligir daño al titán. También se te otorgarán nuevos intentos cada 3 horas, hasta un máximo de 3. El daño infligido al titán durante los intentos de todos los miembros del gremio se acumulará. El titán escapará si no lo matáis antes de que se agote el tiempo. El tiempo restante (o lo que queda para que aparezca el siguiente titán) se muestra en la pestaña Batalla de titanes.
Los titanes presentan rangos distintos entre sí. Los titanes de mayor rango ofrecen mejores botines, pero también cuesta más vencerlos. Si un gremio vence una batalla, con el tiempo se encontrará con titanes de mayor rango, mientras que, si permite que el titán huya, la próxima vez hallará un titán más débil.